Geología y mucho más en la Mancomunidad Geominera de las Cuatro Sierras
Los miembros de la asociación Geología de Segovia han realizado una gran labor de divulgación de la geología en los últimos años y trabajos cómo el libro de ‘Las raíces del paisaje’, además de multitud de rutas guiadas, han contribuido a que la destacada geología de esta provincia fuera conocida. Algunas entidades locales van descubriendo que esa geología y minería que tan íntimamente ligada está a sus municipios se podía divulgar y que a la gente que las visitaba le agradaba conocer estos lugares y sus secretos geológicos.
La Mancomunidad Interprovincial Castellana es una agrupación de 11 términos municipales, 9 segovianos: Navas de Riofrío, La Losa, Ortigosa del Monte, Otero de Herreros, Valdeprados, Vegas de Matute, Zarzuela del Monte, Navas de San Antonio e Ituero y Lama y 2 abulenses: Santa María del Cubillo y Maello. Su territorio, vertebrado por cuatro pequeñas sierras, posee una alta geodiversidad y fruto de esta, de un gran patrimonio minero-histórico. Por eso sus responsables han apos tado por divulgar esos tesoros en esta iniciativa turística que ahora nace y que se ha bautizado cómo Mancomunidad Geominera de las Cuatro Sierras. A partir del 1 de julio se realizarán rutas guiadas gratuitas por cuatro de esos tesoros: el berrocal de Ortigosa del Monte, el yacimiento de los Almadenes en Otero de Herreros, la Risca de Valdeprados y los hornos de cal de Vegas de Matute.
Todos estos lugares, ya conocidos por muchos de los asiduos a la geología de Segovia, podrán ser descubiertos o redescubiertos por quien quiera apuntarse a estas rutas en la web del proyecto: www.mancomunidadgeominera.com Además podrá descubrir en esta web, aspectos curiosos sobre cada una de las poblaciones de la mancomunidad.
Y es que en la Mancomunidad Geominera de las Cuatro Sierras, junto con la importancia geológica que alberga puedes conocer historias curiosas. Historias como la de Medardo Fraile, escritor madrileño de la generación del medio siglo, que compartió tiempo con Ignacio Aldecoa, Sánchez Ferlosio, Carmen Martín Gaite o Ana María Matute. Este maravilloso escritor comparte con sus lectores en sus memorias (el cuento de siempre acabar, 2009) su padre emprendió un negocio minero en Otero de Herreros y que a pesar de que su padre insistía en que acabara la carrera, Medardo Fraile le convenció para poder trabajar en las minas. Esta historia se enmarca a finales de la década de 1940, “en plena guerra fría”, lo que animaba a los más emprendedores a entrar en el mundo de la minería del wolframio, mineral muy importante y rentable en ese momento. Medardo Fraile cuenta cómo vivía en la Estación de Otero de Herreros e iba descubriendo los secretos de “la mina, que en Otero era de galería, y muy rica en wolframio”.
En Mancomunidad Geominera se puede descubrir también la historia de Valdeprados, localidad cuyo nombre evoca a esa dehesa verde, en ocasiones encharcada que se puede contemplar actualmente en primavera y que en el tiempo de nuestros abuelos permanecía encharcada todo el año. Pues bien, resulta que en documentos de 1446 aparece cómo Valseca, un topónimo que indica todo lo contario; y tan sólo 16 años después aparecen documentos que lo denominan ya Valdeprados y confirman que solía llamarse Valseca. ¿Estaremos ante un capricho del contador de Enrique IV, Diego Arias Dávila que acababa de recibir el terreno de Valdeprados en su Mayorazgo?, o bien ¿será fiel reflejo del paso del llamado “óptimo climático” medieval, un periodo muy cálido, a la “pequeña edad de hielo” que pudo transformar el paisaje del piedemonte serrano? Los cambios climáticos en la toponimia segoviana.
También tenemos leyendas cómo la del avaro pastorcillo que no quiso compartir sus cuatro torreznos con un mendigo y este maldijo ese crujiente manjar deseando que se le convirtiera en piedra. Y ahora en Zarzuela del Monte tenemos la piedra de los cuatro torreznos, bien situada gracias al Proyecto Piedras (http://sierradezarzuela.blogspot.com.es) un proyecto que rescata las historias, nombres y leyendas de las rocas graníticas que se reparten por un amplio territorio entre Zarzuela del Monte y Navas de San Antonio.
Esas son sólo alguna de las historias que junto con los tesoros geomineros puedes descubrir en el territorio de la Mancomunidad Geominera de las Cuatro Sierras, apúntate.